BBVA Mi jubilación - Fondo documental

El envejecimiento poblacional es particularmente acusado en España, resultado de la baja tasa de natalidad y del aumento de la esperanza de vida. Así, la tasa de dependencia está previsto que aumente del 29,6 por 100 en 2018 hasta el 49,5 por 100 en 2040. El impacto económico de este cambio demográfico no se circunscribe al sistema del bienestar, sino que afecta a toda la sociedad, e influencia el crecimiento económico, los patrones de consumo y ahorro o la productividad. Este análisis muestra que la contribución de la fuerza laboral al crecimiento del PIB se reducirá de manera marcada en España, pasando de una aportación positiva de +0,6 puntos porcentuales (p.p.) anuales entre 2000-2018 a otra negativa entre -0,4 p.p. y -0,8 p.p. en 2040. Por su parte, la contribución de la fuerza laboral al PIB per c ápita se reducirá del +0,3 p.p. anuales promedio en 2000-2018 hasta -0,2 pp y -0,6 p.p. en 2040. La intensidad de este descenso dependerá de la respuesta en términos de participación en el empleo y de la inmigración. El conjunto de mecanismos existentes para paliarlo abarcan desde el aumento de la tasa de participación, el alargamiento de la vida laboral, mejoras de la productividad o mayores flujos de inmigración. Sin embargo, el impacto del envejecimiento poblacional no se logrará reducir de manera significativa sin aplicar todo el conjunto de mecanismos existentes.

El informe de Natixis mide cuatro pilares: el primero abarca varios indicadores referidos a la salud (esperanza de vida, gasto sanitario por habitante, etc.), el segundo maneja indicadores referidos a la estabilidad institucional y macroeconómica (tasa de dependencia, inflación, tipos de interés, presión fiscal, morosidad, deuda pública, etc.); el tercero, sobre la calidad de vida (calidad del aire, biodiversidad, etc.); finalmente, el cuarto considera la capacidad económica del sistema a la hora de garantizar un nivel de vida suficiente en términos materiales o económicos (renta per cápita, la igualdad de ingresos y tasa de desempleo). Los países mejor posicionados serían Islandia, Suiza, Noruega, Irlanda y Países Bajos, situándose España en el número 32 de los 44 países analizados, es decir, a la altura de Chipre o Hungría.

Intervención en el foro de la Fundación Edad y Vida, sobre Perspectivas económicas y sostenibilidad del Estado del bienestar, de Óscar Arce, director general de Economía y Estadística del Banco de España.

En materia de envejecimiento poblacional, el Informe Anual del Banco de España viene a sostener que: 1) los cambios demográficos van a tener especial incidencia en España. pues en los próximos 25 años será el país de la UE que sufrirá el mayor incremento en la tasa de dependencia (es decir, la ratio entre la población mayor de 65 años y la población de entre 15 y 64 años); 2) entre los factores que explican el envejecimiento poblacional en España, destacan el aumento de la esperanza de vida y la caída de la tasa de fecundidad; 4) el envejecimiento de la población presenta notables implicaciones en el ámbito de la política fiscal, pues la presión demográfica plantea la necesidad de introducir medidas adicionales para reforzar la sostenibilidad financiera del sistema público de pensiones; 5) el envejecimiento de la población también plantea retos muy relevantes en términos del crecimiento potencial de la economía a través de su impacto sobre el mercado laboral y la productividad de los trabajadores, de modo que para evitar el deterioro de la empleabilidad de los trabajadores a medida que envejecen es fundamental reforzar el papel de las políticas activas de empleo y de la formación continua. Posteriormente, estas reflexiones de desarrollan más en profundidad en las páginas 194 a 198 del Informe.