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La fórmula exacta por la que se revalorizarían las pensiones en 2019 fue incierta hasta los últimos compases de 2018. Fue este año, 2018, en el que se introdujo un importante cambio que favorecía notablemente a los pensionistas: las pensiones no se actualizarían según la fórmula vigente desde 2014, el Índice de Revalorización de las Pensiones (IRP), sino directamente en línea con el IPC. Así, el pasado año los pensionistas vieron sus pensiones incrementadas un 1,6% en lugar del 0,25% que hubiesen aumentado de haberse mantenido el IRP. Este cambio en la fórmula de revalorización de las pensiones atiende a acuerdos políticos alcanzados en el marco de la negociación de los Presupuestos Generales del Estado para 2018. Y este acuerdo alcanza también a la revalorización de 2019.
La subida de las pensiones de 2019
En 2019, se ha seguido la misma fórmula: la no aplicación del IRP y la vinculación directa de la revalorización al IPC. La duda que existía, y que se aclaró poco antes de terminar 2018, es qué IPC se tomaría como referencia. En lugar de tomar el IPC de noviembre, se optó por aplicar la media del IPC mensual comprendido entre diciembre de 2017 y noviembre de 2018.
Así, la revalorización para 2019 asciende al 1,6%, mismo porcentaje que en 2018 y teniendo en cuenta que la aplicación del IRP hubiera vuelto a suponer una revalorización del 0,25%. ¿Por qué? El IRP está ligado a la “salud” de las cuentas de la Seguridad Social. Dado que la situación es de déficit, la revalorización se limitaría al mínimo contemplado en la ley. De hecho, la aplicación del IRP sin el suelo del 0,25% implicaría no solo no revalorizar las pensiones, sino reducirlas.
Por su parte, las pensiones mínimas se han visto incrementadas un 3%, el mismo porcentaje que crecieron en 2018, y similar al aumento que han experimentado las pensiones no contributivas.
Además, la pensión de viudedad se vuelve a ver incrementada para beneficiarios mayores de 65 años que cumplan determinados requisitos, entre ellos no percibir otra pensión pública y acreditar determinada carencia de rentas. Para estos beneficiarios, la cuantía de la pensión pasa del 56% de la base reguladora del causante al 60% de dicha base. En 2018 ya se produjo un incremento, desde el 52% hasta el 56%.
¿Y en 2020, qué va a pasar con la subida de las pensiones?
Lo que parece totalmente descontado es que el IRP, un componente de la reforma de las pensiones de 2013, ha pasado a la historia. La intención del actual Gobierno, que no introdujo cambios en lo pactado por el anterior Ejecutivo para 2018 y 2019, es mantener la fórmula de la revalorización directamente ligada al IPC, replicando la modalidad aplicada en 2019, es decir, tomar el IPC medio de los 12 meses previos a diciembre del año inmediatamente anterior.
¿Quieres saber en qué cuantías han quedado las pensiones mínimas para este año? Así quedan las pensiones mínimas durante 2019.
